JUEGO DE ESPEJOS EN TORNO A BERLANGA

Con Juego de espejos en torno a Berlanga pretendemos rastrear la fecunda red de relaciones, influencias mutuas o convergencias vitales del cineasta valenciano con otros destacados nombres de la historia del cine español, como Rafael Azcona, Juan Estelrich, Marco Ferreri o Fernando Fernán Gómez, con los que mantuvo distintas vinculaciones a lo largo de su carrera. Así se refleja en diversos filmes, algunos de los cuales dialogan entre sí, con sus correspondencias y similitudes. Es el caso, por ejemplo, de los sendos duetos conformados, por un lado, por El cochecito y El pisito, ambas de Ferreri, y por Plácido y El verdugo, por otro, cuyo nexo de unión es la insigne figura de Azcona. Su participación como guionista en estos títulos es clave para entender su importancia en el contexto del cine español de la época: aporta una feroz mirada, plena de esperpento y humor negro, sobre la España del momento. Este afortunado encuentro con Azcona tendrá mucho que ver con el giro considerable –hay quien habla de viraje radical– que se puede percibir en la trayectoria cinematográfica de Berlanga , desde entonces vinculada al guionista riojano.

También podemos comprobar, aunque su colaboración profesional directa es puntual y escasa, cómo las carreras e itinerarios vitales de Berlanga y Fernán Gómez, que nacieron el mismo año, se configuran casi desde el inicio como caminos paralelos que evolucionan en más de una ocasión al unísono, compartiendo una misma tradición cultural (el sainete, el esperpento, la picaresca...). Fernán Gómez, ya un actor reconocido en ese momento, protagoniza la primera película de Berlanga y Bardem, Esa pareja feliz, en cuyo guion reconoce un deseo de autenticidad. Pero más allá de su participación actoral, este título mítico, que abre puertas en el cine español, influye además de manera importante en el Fernán Gómez director, como lo atestigua él mismo al declarar que “debo reconocer que si no existiera Esa pareja feliz es muy probable que yo no hubiese hecho La vida por delante; ambas, Esa pareja feliz y La vida por delante son producto del shock que en nosotros representó el neorrealismo italiano frente al cine standard americano.”